jueves, 22 de julio de 2010

LA GOLONDRINA DE HITLER

Era un día calmo, pero en la base aerea del 1/KG (J) 54 había una actividad ferviente. Los aviones rugían muy distinto y un fuerte olor a parafina quemada se olía por todos lados. Corrían de un lugar para otro llevando munisiones y suministros. La tripulación de tierra preparaba los nuevos reactores con forma de tiburon con mucha espectativa y asombro; una gran esperanza, en que esas nuevas aeronaves cambíara el curso de la guerra que estaba llegando a su fin.
Era el día del debut del Messerschmitt 262, en la base sercana a Würzburg, la experiencia previa no había sido muy buena.

Esa mañana de Febrero estaban todos alertas a los B-24 y los B-17 escoltados por los Spitfire y los nuevos P-51 Mustang. Los aliados intentarían golpear fuertemente el corazón de Alemania y acabar la guerra.

Todos los pilotos del Me- 262 sabían que comprender esta nueva máquina requería de un entrenamiento distinto, del que casi no tendrían. Los motores a embolo reaccionaban en forma seca a la palanca de gases, los reatores Junker Jumo lo hacían muy pesadamente. Tambíen sabían que si accionaban la palanca de gases violentamente el motor se incendiaba o apagaba perdiendo sustentación. Era una transición deficil de realizar en muy poco tiempo.

Pero a pesar de todo el subteniente Rudolph Rademacher, esa mañana, tomó sus pertrechos confió en sus cuatro cañones de 30mm. y en los casi 870 Km/h. que podían dar sus motores.

Rudolph asumió la misión de su comandante, dar caza a los bombarderos aliados y a su escolta. La misión tenía varios riesgos, que el avión no respondiera, entrar en fuego cruzado con la falk y luego, en el momento más crítico del aterrizage algún escolta de la formación se pusiera a distancia de tiro. Por eso tantos Bf -109 volaban sobre la base como avispas.



Rudolph tenía una basta experiencia, sería de los primeros pilotos de la era del "avión a choro" de combate, y eso lo sabía; pero también sabía que quizas sería un esfuerzo inutil. Pero ante todo era un soldado y además, piloto de caza. Por sus venas corría esa mezcla de patriotismo y adrenalina que genera estar al mando de una nueva generación de cazas de combate.
Estaba preparando su misión junto a sus compañeros, de como romper la formación de escolata de los bombarderos aliados, de cuanto tiempo de combate tendrían y de las posibles vías de escape hacia la base.


Ni bien terminaron el subteniente y su escuadrilla sonó la alarma. Una formación de cerrada de decenas de B-29 y B-17 fuertemente escoltadas por Spitfire y P-51 Mustang intetaban penetrar y bombardear Berlín una vez más.

Rudolph colocó las bengalas en sus botas, su campera de vuelo y su casco. Se zambulló dentro de la carlinga de su flamante Me- 262. Se puso sus viejos guantes de badana negros que tantas veces lo acopañó en el combate con los Bf-109 y los Fw-190. El pulgar, gastado de tanto apretar el mortifero botón artillero de la palanca de mandos... le trajo un instante de inexplicable nostalgia.

La tripulación de tierra ayudó a controlar y poner en marcha motores, a colocar cinturones y cerrar la cabina. Ya en la cabecera de la pista pavimentada con una mano en el control de mandos y la otra en la palanca de gaces y con los motores a punto de explotar, libera frenos y sale como una catapulta. No hay mucho tiempo, hay que interceptar la formación. El contacto por radio no existe. Rudolph dio instrucciones precisas a su gente de poder retomarlo cuando se tenga contacto visual con la formación.

Humo, fuego cruzado, rafagas por doquier, explosiones. Artilleros desesperados, todos luchando por defender su objetivo...



Sí, es un relato imaginario de lo que pasó por aquel mes de Febrero de 1945. Lo cierto es que la Golondrina de Hitler, el Me -262 de Rudolph Rademacher demostró que intimidaba más allá de su forma.


AQUÍ SU FACTURA DE AQUEL MES DE FEBRERO
1.2.1945 - Spitfire 11./JG 7 Braunschweig / Possibly Tempest of 274 Sqn RAF flown by Flt Lt GJ Bruce
3.2.1945 - B-24 11./JG 7
3.2.1945 - B-24 11./JG 7
9.2.1945 - B-17 11./JG 7 Berlin area
9.2.1945 - B-17 11./JG 7 Berlin area
14.2.1945 - B-17 11./JG 7 Lübeck-Neumünster
16.2.1945 - P-51 11./JG 7 Near Hannover / P-51 of 325FG, USAAF flown by 1st Lt BT Crosby, killed
24.2.1945 - B-24 11./JG 7 Possibly B-17 of 94BG, USAAF
27.2.1945 - B-24 11./JG 7 Halle-Leipzig

Sin dudas ya era un as al igual que Adolf Gallan, pero no fué suficiente para frenar el abance aliado sobre Alemania, el mismo Ruolph diría en la pos guerra "llegaron pocos y muy tarde"...





1 comentario:

  1. Esta bueno el articulo... podrias publicar algo de aviación nacional.
    Muy bueno el blog.
    Enrico Caruso

    ResponderEliminar